Comienzo a pillarle el truco a esto. Creo que las reglas del juego no son como a mí me las contaron.
Empecé desarmada y sin saber que eras mi rival, ahí tenías tú ventaja que lo sabías desde hace mucho. Jugué despistada la primera pantalla y tú aprovechaste para adelantarme hasta que te perdí de vista. En la segunda me fue algo mejor, pese a que jugábamos en tu campo y yo olvidé mi mochila en casa. Y en el resto hemos ido alternando los golpes bajos aunque con una considerable ventaja por tu parte.
La última vez que jugamos sin embargo, aprendí algunos trucos. Usando la puerta del espejo casi conseguí que abandonaras. Pero llegaste a un pasadizo secreto del que tú sólo intuías la existencia y pudiste seguir luchando.
Con un soplo de olvido obtuve un tiempo precioso para descolocarte y que dieras vueltas en círculos mientras yo daba vida a un dragón que me hará volar hasta la meta.
Y con la ayuda de mis nuevos aliados logré un cambio de escenario en el que por fin yo tenía ventaja y adelanté 18 casillas. Bueno, he de reconocer que tuve que retroceder una al principio para poder preparar mejor el terreno, así que sólo fueron 17.
Ahora estamos igualados y tengo que admitir que eres bueno, pero así es más emocionante. Eso sí, ahora prepárate, que el próximo turno es mío.
10.10.09
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Que tiemble tu adversario... ;)
ResponderEliminarAunque no termino de pillar los temas personales que tiene pinta existen tras este post, me gusta el tono que utilizas y como lo cuentas :)
ResponderEliminarMe sumo al anterior comentario. Suena a post muy muy personal. Quizás ahí resida su gracia, en aventurar cual podría ser la historia que no nos cuentas. Fijo que a cada uno se le ocurre una distinta. De todos modos espero que no os hagais mucho daño
ResponderEliminarDar cera.
ResponderEliminarPulir cera.
Muajaja, Marina, que tiemble como tú bien dices :).
ResponderEliminarThanos, no te preocupes siempre puedes hacer como Pan e intentar inventar la historia de fondo que seguro que también entretiene. Me alegro de que te guste!
Y Pan, tranquilo que no es tan autobiográfico como parece y en realidad dudo que pudiera salir herido alguien.
Rebequita, Rebequita, no me digas que no es una manera 'sutil' de explicarlo... :P
Gracias a todos, chicos!