31.12.10

Dime los tuyos.

Estar triste, pasarlo mal, no sonreír, no aprender nada, no moverme de casa, no terminar de leer ningún libro, que no me guste ninguna de las películas que vea y no pasar tiempo contigo, ni contigo, ni, sobre todo, contigo.
Estos son mis propósitos para el nuevo año y espero que, como todos los años, ninguno de ellos se cumpla.

15.12.10

¡Salta!

El mundo es un parque de atracciones y yo llevaba mucho tiempo dando vueltas en el tiovivo. Pero debe ser época de tener suerte porque, de repente, ha reaparecido alguien para enseñarme que la vida es mucho mejor cuando la convertís en una montaña rusa.
Y es que a veces después de unas cuantas vueltas, cuando estás borracha por culpa de ingentes cantidades de alegría, cuesta distinguir por dónde andas y es más fácil zigzaguear que andar recto.
Además tengo que confesarte una cosa: me invade la curiosidad por saber cuál será el siguiente looping que me hará volar.