16.6.09

Venganza.

Era mi diluvio, pero no mi barca. Ya no. Él me la había quitado. Ahora no paseaba conmigo, él era quien la acompañaba. La mano que sujetaba ya no era la mía, sino la de ese... ¡Maldita sea! ¿Cómo podía haberme hecho eso? Ella sabía que le odiaba. Pero me vengaría. Cuando no se dieran cuenta me acercaría y le dejaría sin su bien más preciado. Echaría a volar su cometa.

3 comentarios:

  1. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  2. Eliminé mi comentario anterior y ahora lo escribo correctamente XD.

    Jummm esto tiene un doble sentido aplicado a lo mundano con una escopeta en la mano XDDD

    ResponderEliminar
  3. a quién dices que matamos? digooo... de quién dices que nos vengamos? :P

    ResponderEliminar